Este paso implica tomar muchas decisiones
Numerosas empresas deciden sumergirse en la aventura de internacionalizarse. Como todos los logros que suceden en el campo profesional, no es un paso que se consiga de manera sencilla y rápida. Implica tiempo, esfuerzo, compromiso y valentía, pero seguro que merecerá la pena con creces. Cabe destacar que, tal y señala forbes.com, “la internacionalización de una empresa hace más rentable los productos y servicios que ofrece, al tiempo que fortalece su competitividad, lo que propicia un crecimiento en su cartera de clientes”.
Tomar este paso implica tener en cuenta diversos aspectos como por ejemplo, definir una estrategia con todas las personas del equipo de la empresa que estén implicadas, llevar a cabo un análisis DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades), determinar cuáles serán los canales de venta, desgranar una línea de trabajo en torno al marketing y la comunicación, etcétera. En definitiva, no se pueden dar pasos de ciego, es por ello que antes de enfrentarse a un mercado extranjero es necesario tener bien definida la misión que se va a llevar a cabo.
Sin duda, abrir las puertas al extranjero es una decisión que las empresas valoran ya que supone que sean más competitivas y ambiciosas.
informe INTERNACIONALIZACION 255